Nocturna la Grana 22-06-2013
Nocturna La Grana 22 de junio de 2013. El tiempo se ha precipitado. Nos ha traído, de nuevo, LA NOCTURNA, LA NOCTURNA LA GRANA, 2013. Es nuestra ruta estrella que viene a confirmar un año de experiencias. Un año de recorridos compartidos, de recorridos harlados, mimados, sufridos, recordados. La Nocturna, al final, viene como un reto para concluir nuestros esfuerzos senderistas. La Grana callada, humilde, alomada, perenne, silenciosa, nos espera.
Con el paso del tiempo su espera se va cargando de interrogantes. De dudas sobre nuestras posibilidades. De zozobras compartidas. Cargada de deseos de liberación, de goce, de plenitud compartida.
Fruto del esfuerzo de su ascenso. Esfuerzo salpicado por las miradas perdidas en un horizonte rojizo, indicador del declinar del día. Y con la despedida del día se nos aparece un espacio amigo de la reflexión.
Pensamiento dialogado con uno mismo. Ideas y sensaciones que circulan libremente al compás de un paso complicado, esforzado. Es el esfuerzo del ascenso. Es la necesidad de continuar, alcanzar la meta. Es el deseo de cobijarse en la propia sensación, en la íntima reflexión. Es el anhelo de sentirse acompañado, de compartir, de paladear juntos las vivencias mas personales. Andar. Ascender. Es el goce de volver a realizar La Nocturna La Grana.
Intentando renovarnos cada año. Nos renovamos con la nueva experiencia, única, de la subida. Nos renovamos con la nueva experiencia, única, del gozo del atardecer en ascenso.
Nos renovamos con la nueva experiencia, única, del apoyo incondicional de nuestros amigos del 4 x 4. Nos renovamos con el nuevo encuentro, único, de la luna llena de junio.
Provocación a nuestros sentidos. Plenitud del grito de hip, hip, urra, único, junto al punto geodésico. Y este año nos renovamos recuperando a una amiga senderista. Inés. Ella nos ha acompañado en muchas rutas. Se nos perdió en el camino de rutas más arriesgadas. Se nos fue en el contacto con otros muchos grupos de senderistas. Se nos ocupó en el estudio pormenorizado de la naturaleza: las orquídeas, los paisajes, las aves. Este año nos renovamos con sus enseñanzas. Nuestras amigas, próximas, pero alejadas las aves nocturnas presentes en nuestro recorrido, habitantes de la noche, se nos acercan un poco, de la mano de Inés. Y con Inés renovamos nuestra Nocturna. Y con ella compartimos el goce de haber conformado un grupo, el grupo de los senderistas, extenso, interesado en interesante, sabio y rico en la construcción de un saber compartido. Pienso que nuestras vecinas las lechuzas, los búhos chicos, los mochuelos, los cárabos, los búhos reales y los autillos se van a extrañar de nuestro interés pero nos van a aplaudir desde sus escondites nocturnos.