MIGUEL ÁNGEL CRUZ VILLALOBOS vino a vivir a este mundo el 14 de marzo de 1953. Sus padres Miguel y Conchita lo cuidaron con mimo amoroso y forjaron su carácter y personalidad durante su infancia, adolescencia y juventud, hasta que enamorado profundamente de Mari Carmen Aguilera Peña, ambos fundaron un nuevo hogar en cuyo nido aparecen dos nuevas criaturitas: Irene y Cristina Eugenia.
Su educación e instrucción así como la formación cristiana se inician en su familia, en el Colegio Divina Pastora y continúan en el colegio franciscano de San Antonio de Padua, donde, salvo breves etapas, aun permanece impartiendo su docencia. Se gradúa como Maestro de Primera Enseñanza en la Escuela Normal de Magisterio de Jaén Sus años de docencia y experiencia lo facultan para dar clase, en el primer ciclo de Secundaria, de Tecnología, Ciencias Naturales y Educación Artística. El amor por la música le lleva a especializarse en dicha disciplina.
Cuando observa que sus manos tienen palos por dedos y que costaría “dios y ayuda” educarlos para tocar algún instrumento, también se da cuenta de que el mejor instrumento musical se lo ha dado Dios, como a todo ser humano, en su garganta y así, sin tener una voz bonita, pero sí profunda y efectiva, forma parte de la cuerda de los bajos en la Coral Tuccitana durante toda su historia.
Siempre que su Iglesia le ha pedido algo ha estado solícito y así, ha sido Vicepresidente del Consejo de Pastoral Arciprestal, Presidente de la Agrupación Arciprestal de Hermandades y Cofradías de Martos, Miembro de la Permanente de Cáritas Interparroquial, Secretario de Cáritas Parroquial de San Francisco de Asís, Secretario de la Seráfica Cofradía de María Santísima de la Soledad, Diputado Mayor de Gobierno en la Primitiva Pro-Hermandad de la Santa Vera- Cruz y Cofradía de Penitencia y Silencio de Nuestro Padre jesús de Pasión y Nuestra Señora de Nazareth, Presidente de la Comisión Organizadora de los Actos Conmemorativos del MCL Aniversario del Martirio de San Amador, catequista durante más de treinta años y miembro colaborador y activo en su parroquia. Ha pregonado a su hermandad y publicado numerosos artículos en “NAZARENO” (de la que fue miembro fundador de su Consejo de Redacción), en “Mi Patrón” (del cual fue Coordinador junto con Antonio Moncayo Garrido) y en boletines de Hermandades y Cofradías de Martos.
El cariño a la cultura de su pueblo le ha llevado a ser, junto con Cándido Villar Castro, premio a la investigación “Manuel Caballero Venzalá” por su trabajo sobre el habla marteña y posterior publicación de la obra “Vocabulario Marteño”. Anteriormente el CEP de Jaén editó y publicó, de los mismos autores, un opúsculo llamado “Diccionario de palabras andaluzas”. Ha editado (pero no publicado) dos textos de producción propia, sobre tecnología. El Centro de Profesores de Jaén editó y publicó una obra llamada “Experiencias de Física y Química” en la que Miguel Ángel aparece como autor de la parte de Tecnología junto con Rafael Fernández Aranda (dibujos) y Fernando Colodro Campos como coordinador y la parte de Física- Química.
Nuestro pregonero se honra en ser amigo de sus amigos y respetuoso con todos los que discrepan de sus ideas en todos los ámbitos. Es afable, sincero y cordial y un profundo enamorado de su pueblo, de sus gentes y de su cultura.