Paraje de la Maleza.
Las bocaminas.
En la cara norte de la Sierra de la Grana existen tres bocaminas de una profundidad considerable. Recogen el agua subterránea de la Maleza. Estas bocaminas están inaccesibles porque existe una vegetación muy abundante en su entorno. Su agua es conducida a una caseta. Aquí se regula el agua recogida. En función de su abundancia hay parte del agua que se deja libre, para alimentar el Arroyo de la Maleza. Cuando hay años de lluvia abundante, con precipitaciones superiores a los 500 litros, el nivel freático sube mucho y se arroja un gran caudal de agua. En este caso el agua se recoge y conduce para el abastecimiento de Martos. Su caudal es tan abundante que con esta agua se llega a abastecer las necesidades de toda la población de Martos y el Monte. Se estima que llega a arrojar entre 7000 y 7500 metros cúbicos de agua al día.
El sondeo.
Para suplir las necesidades de agua, cuando las bocaminas dejan de fluir, se construyó un sondeo de 296 metros de profundidad. Este pozo está también al pie de la Sierra de la Grana, en su cara este. El sondeo tiene un diámetro de 150 mm. Arroja un caudal medio de 16 litros por segundo, lo que hace un caudal de 1400 metros cúbicos al día. El agua, extraída con una bomba, es conducida a una arqueta donde confluye con el agua que proviene de las bocaminas. Esta arqueta es redonda y se encuentra al borde del camino de acceso, a la izquierda. Hasta ahora no se ha agotado el manantial que abastece a este pozo. Pareciera como si a esta profundidad existiese un pantano natural.
El agua que proviene del Paraje de la Maleza es de excelente calidad, por eso solo necesita de la desinfección, que se hace a través del cloro.
El agua recogida en la arqueta llega, por su propio peso, al depósito del Portillo.
Antes de llegar al depósito existe una caseta blanca donde hay una bomba de dosificación que añade de forma continuada el cloro necesario al agua. Esta dosificación se revisa diariamente.